En esta entrada voy a explicaros cómo asar pimientos en el horno, aunque supuestamente es muy sencillo hay que seguir algunos pasos que luego son importantes para que no se nos quemen y también para pelarlos bien sin problema.

Ingredientes:

  • Pimiento rojo o pimiento verde o ambos juntos, como queráis.
  • Sal gorda
  • Aceite
  • 2 cucharadas grandes de agua

 

Paso 1:

Como vais en la foto en este caso hemos puesto dos pimientos verdes y uno rojo, los lavamos y secamos bien y los ponemos en la fuente, les untamos con las manos con aceite (no mucho), y les espolvoreamos con sal gorda (este es el secreto para que luego se pelen sin problema! -consejo de la abuela Paquita-, y ponemos en la fuente dos cucharadas grandes de agua -consejo de la abuela Paquita también: «siempre que se haga un asado en el horno hay que echar un poquito de agua, sea verdura, sea cordero, pollo, etc… para que haya humedad y quede jugoso».

Paso 2:

Ahora ya ponemos el horno a 180º y cuando esté caliente metemos nuestra fuente con los pimientos y vamos a tenerlos unos 15 minutos en principio antes de darles la vuelta…, pasado ese tiempo vemos si la piel está un poco dorada y procedemos a darles la vuelta…

Paso 3:

Pues cuando hayan pasado otros 15-20 minutos (ya sabéis que el tiempo depende del horno, dureza de los pimientos, etc.. así que lo mejor es ver que está la piel un poco tostada ya y metemos un cuchillo y pinchamos a ver si están blandos o al menos con la consistencia que a nosotros nos guste.  Y ya los sacamos y a pelarlos cuando se queden templados, no os queméis!

Una vez que los tenéis ya pelados, los cortáis en tiras o trozos y ya podéis probar este manjar, ya sea como una ensalada con tomate y cebolla, solos con atún, para acompañar cualquier plato, y un largo largo etc….